Es just
Si l'infern s'obrís,
obrís les seves entranyes i
engolís sense pietat
a la mare que roba un fill al pare,
el cel no podria més que alegrar-se’n.
Si l’egoisme es més fort que l’amor
Si l’amor es torna impotent
per recuperar el fill sostret;
Que caigui sobre ella
la ira del cor
la ira de la ment
la ira dels deus
Perquè això no es venjança.
Es justícia!
© Montse Turà
15 de juliol de 2009
De Barcelona a Casablanca
dimarts, 27 d’abril del 2010
diumenge, 25 d’abril del 2010
Escrito en caliente
Escrito en caliente
dilluns, 2 /
novembre / 2009
A esta hora, si, no antes ni después “R” hizo un recurso, era previsible si no hubiera sido porqué llamó su hermana por teléfono diciendo que venían las dos, madre e hija, también llamó su hermano, ese que quería venir a la boda y “R” se lo prohibió, para informarse del asunto.
“R” no tenía familia, o eso dijo “R”, la tenía pero nunca significó nada para ella hasta que la necesitó.
Puso el recurso diez minutos antes de que cerraran el juzgado, cuando ya había quedado con “P”, su marido, que iba a Alemania desde Canarias justo el día tres para recoger a su hija.
Después de cuatro meses y dieciocho días de retener en Alemania a la hija de ambos sin el consentimiento paterno, ella puso un recurso diciendo que la niña ya se había habituado allí.
Después de cuatro meses y dieciocho días de retener en Alemania a la hija de ambos sin el consentimiento paterno y habiendo perdido un juicio del tribunal familiar alemán de Berlín y el del Tribunal Jurídico de la Haya, ella puso un recurso diciendo que la niña ya se había habituado allí.
Pasa el tiempo a la contra. Cuantos más días pasan, más se habitúa la niña allí. Pero la niña nació en Canarias y el único domicilio conyugal del matrimonio es Canario. ¿Por qué sigue la niña allí?
¿La madre es una buena madre si no quiere negociar ni un régimen de visitas?
¿La madre es una buena madre si no deja que su hija vea a la familia paterna?
¿La madre es una buena madre si solo quieres estar en Alemania por que el estado alemán da muchas ayudas a las madres separadas y con hijos y si encima estudian entonces es la panacea?
Por otro lado, el juzgado número cinco de Gran Canaria no se ha molestado en abrir el expediente con fecha del 8 de Julio de 2009. El juzgado número cinco de Gran Canaria tiene trabajo acumulado y pendiente y no hay cribaje para decidir que es más urgente.
No importa que una madre haya sustraído a su hija a un padre y demás familia y se la haya llevado de Gran Canaria a Alemania. No importa el sufrimiento del padre y de toda la familia. Para ellos no debe ser urgente. Para ellos, la madre y el juzgado, si el padre tiene que ir a urgencias por la noche con taquicardias, no debe ser urgente, si la familia se desplaza a Berlín para ver a su nieta y “R” no deja que la vean, privando a los abuelos y a la nieta disfrutar de su relación, no debe ser urgente.
Para ellos, la madre y el juzgado, no debe ser urgente que una niña de dos años de edad, justo en la época de aprendizaje, en cuatro meses y 18 días hable ya solo alemán, impidiendo con eso que se entienda con su familia de España.
¿Que es urgente para el juzgado número cinco de Gran Canaria?
¿Qué es urgente para los juzgados españoles o los juzgados en general?
Tenemos que esperar, una vez más, que la justicia decida lo que es mejor para la menor.
Da igual que el padre y la familia paterna pierdan el tiempo, el dinero o su propio juicio.
Esperaremos una vez más.
Pero yo en particular no olvido ni olvidaré, ni dejaré que nadie implicado olvide esos cuatro meses y el tiempo que nos quede. No es una amenaza, es una realidad.
Café con leche
Esta mañana me preparé un café con leche.
Leche, dos de sacarina y dos de azúcar. ¡Sin café!
A la mitad de la taza me di cuenta. Estaba muy dulce y al mirar vi q era blanco.
Sentí pereza, no me levanté y seguí bebiendo.
Finalmente, hice acto de contrición y le añadí café soluble.
Seguía estando dulce.
Cuando casi ya no había, lo tire.
© Montse Turà
Leche, dos de sacarina y dos de azúcar. ¡Sin café!
A la mitad de la taza me di cuenta. Estaba muy dulce y al mirar vi q era blanco.
Sentí pereza, no me levanté y seguí bebiendo.
Finalmente, hice acto de contrición y le añadí café soluble.
Seguía estando dulce.
Cuando casi ya no había, lo tire.
© Montse Turà
A l'avió
A l'avió
dimecres, 7
/ octubre / 2009
L'altre dia a l'avió, un avió petit, petit, d’unes 50 places, amb
hélices d'aquelles que tens de donar-li un cop amb la ma, i les rodes a
la meva alçada, dos sota cada ala, i nomes hi havien 13 persones, el cas
es que ve l'assafata i diu, -¿Quiere beber algo?- I jo, -¿Tiene cambio d
50€?- Diu ella, -No, no, es gratis, una bebida y frutos secos-
Jo vaig voler pensar de pressa i ai, ai, ara que prenc? I entre que l'avió semblava de joguina i que no se perque vaig pensar amb la wini noseque i en melendi, vaig i dic: -¡Un wiski por favor!-
Com si fos alló de lo mes normal, vaja, que potser si que es normal, però no en mi, i va l'hostesa i diu, -No tenemos alcohol, la única cosa que tiene alcohol es una cerveza-...
A mi se’m va quedar cara de pressec total i dic, -Pues no, cerveza no me apetece, déme una horchata con frutos secos-
Si la meva cara era de pressec, de la d'ella encara ric quan hi penso!
jajajaj
© Montse Turà
Jo vaig voler pensar de pressa i ai, ai, ara que prenc? I entre que l'avió semblava de joguina i que no se perque vaig pensar amb la wini noseque i en melendi, vaig i dic: -¡Un wiski por favor!-
Com si fos alló de lo mes normal, vaja, que potser si que es normal, però no en mi, i va l'hostesa i diu, -No tenemos alcohol, la única cosa que tiene alcohol es una cerveza-...
A mi se’m va quedar cara de pressec total i dic, -Pues no, cerveza no me apetece, déme una horchata con frutos secos-
Si la meva cara era de pressec, de la d'ella encara ric quan hi penso!
jajajaj
© Montse Turà
A la Rukiye
A la Rukiye
dilluns, 10
/ agost / 2009
Va marxar i se la va endur
No estava a gust
i va marxar i se la va endur
Marit
Avis
Germans
Amics
Veïns
No estava a gust
i va marxar i se la va endur
No li va importar res
Amor
Sentiments
Dolor
Angoixa
Insomni
Malsons
Res li va fer canviar d’opinió
No estava a gust
I va marxar i se la va endur
Orfe de pare
Orfe de família
Pluja, vents forts
Tempesta huracanada
Nits sense lluna
Udolar de llops ferits de manada amb pèrdua
Caminar amb boira espessa
amb ulls oberts, sense parpelles
Buscant, buscant...
No li va importar res
No estava a gust
i va marxar i se la va endur.
© Montse Turà
No estava a gust
i va marxar i se la va endur
Marit
Avis
Germans
Amics
Veïns
No estava a gust
i va marxar i se la va endur
No li va importar res
Amor
Sentiments
Dolor
Angoixa
Insomni
Malsons
Res li va fer canviar d’opinió
No estava a gust
I va marxar i se la va endur
Orfe de pare
Orfe de família
Pluja, vents forts
Tempesta huracanada
Nits sense lluna
Udolar de llops ferits de manada amb pèrdua
Caminar amb boira espessa
amb ulls oberts, sense parpelles
Buscant, buscant...
No li va importar res
No estava a gust
i va marxar i se la va endur.
© Montse Turà
No hablamos de jeringuillas
x a la Carme Vila, (amiga en altres dimensions)
Miré hacia atrás, quería volver a verla y ya no estaba.
¡Se evaporó! Así tal cual.
Solamente había dado tres pasos, uno, dos, tres, me di la vuelta y ya no estaba.
Me paré y reflexioné. No era posible, no había tiempo material para que hubiera llegado a la otra esquina.
¿Lo habría soñado? ¿Había soñado que estuve comiendo con C.? Miré el reloj; las 16:45 h. estuvimos en el restaurante tres horas, ¿o sólo estuve yo en el restaurante? No, no, imposible que una comida dure tres horas si uno come solo.
Marcaje, placaje, contra placaje…, eso fue hace años, como diría A., en la prehistoria. No televisores, no lavadoras, no ascensores, aunque si tiendas familiares, todavía hoy estuvimos recordando la manera, no una manera, si no la manera de envolver las compras, los regalos. ¡Ah, la prehistoria! Tiendas dónde las botellas de colonia se rellenaban con mezclas al gusto de cada cliente, a veces con unos embudos, otras a pulso y si había suerte con un artilugio parecido a lo que hoy conocemos como jeringuillas.
No hablamos de jeringuillas. Pero si del marcaje. No averiguamos muy bien que era lo que nos tatuaban, ni donde, pero está ahí, y se manifiesta cada vez que actuamos en un acto reflejo. -A F. no quiero saludarle, y cuando me cruzo con F. saludo-
F. era dueña de una tienda, y cuándo ibas a comprar parecía que te estaba haciendo un favor. Prepotencia, arrogancia, altivez, eso fue lo único que no vendía F. y por eso sigue teniéndolo intacto, de lo demás está vacía. Sin embargo no quiero saludarla y la saludo. Lo que nos hacían no era sólo marcaje, era placaje.
Subieron las hipotecas, ya no se puede comprar. Círculos, solo son círculos. C. cuenta que de la charla no entendió nada. Estaba contenta con su hipoteca, ¿para que hablar de números, cuándo se puede hablar de emociones? No hablamos de jeringuillas. Tampoco hablamos de chacras. Despidos y también despidos voluntarios en contra placaje. Quizá C. consiga no saludar a F… El camino a recorrer es difícil como la misma necesidad, unas veces satisfecha y otras no, de aceptarse a uno mismo.
Reímos, comimos, volvimos a reír, hablamos y hablamos, pero sobre todo nos reímos. Sin embargo, se fue y no vi cómo.
¿Quizá C. es sólo un espíritu?
Miré hacia atrás, quería volver a verla y ya no estaba.
¡Se evaporó! Así tal cual.
Solamente había dado tres pasos, uno, dos, tres, me di la vuelta y ya no estaba.
Me paré y reflexioné. No era posible, no había tiempo material para que hubiera llegado a la otra esquina.
¿Lo habría soñado? ¿Había soñado que estuve comiendo con C.? Miré el reloj; las 16:45 h. estuvimos en el restaurante tres horas, ¿o sólo estuve yo en el restaurante? No, no, imposible que una comida dure tres horas si uno come solo.
Marcaje, placaje, contra placaje…, eso fue hace años, como diría A., en la prehistoria. No televisores, no lavadoras, no ascensores, aunque si tiendas familiares, todavía hoy estuvimos recordando la manera, no una manera, si no la manera de envolver las compras, los regalos. ¡Ah, la prehistoria! Tiendas dónde las botellas de colonia se rellenaban con mezclas al gusto de cada cliente, a veces con unos embudos, otras a pulso y si había suerte con un artilugio parecido a lo que hoy conocemos como jeringuillas.
No hablamos de jeringuillas. Pero si del marcaje. No averiguamos muy bien que era lo que nos tatuaban, ni donde, pero está ahí, y se manifiesta cada vez que actuamos en un acto reflejo. -A F. no quiero saludarle, y cuando me cruzo con F. saludo-
F. era dueña de una tienda, y cuándo ibas a comprar parecía que te estaba haciendo un favor. Prepotencia, arrogancia, altivez, eso fue lo único que no vendía F. y por eso sigue teniéndolo intacto, de lo demás está vacía. Sin embargo no quiero saludarla y la saludo. Lo que nos hacían no era sólo marcaje, era placaje.
Subieron las hipotecas, ya no se puede comprar. Círculos, solo son círculos. C. cuenta que de la charla no entendió nada. Estaba contenta con su hipoteca, ¿para que hablar de números, cuándo se puede hablar de emociones? No hablamos de jeringuillas. Tampoco hablamos de chacras. Despidos y también despidos voluntarios en contra placaje. Quizá C. consiga no saludar a F… El camino a recorrer es difícil como la misma necesidad, unas veces satisfecha y otras no, de aceptarse a uno mismo.
Reímos, comimos, volvimos a reír, hablamos y hablamos, pero sobre todo nos reímos. Sin embargo, se fue y no vi cómo.
¿Quizá C. es sólo un espíritu?
recull
http://stores.lulu.com/mon tsetura
Crítica de Alena Collar.
Viene a Referencias un libro que tiene dos cualidades a destacar: la calidad de sus fotografías, originales de la autora, y la calidad de sus textos.
Los textos de Montse Turà son una gavilla de poemas y prosas, breve en cada uno de ellos nos hablan a través de las imágenes y las palabras de cosas tan sencillas como vivir, morir, amar y desencontrarse.
En su mayoría 42 escritos en castellano, 7 en catalán, atraviesan la desolación de lo habitual con una mirada detenida, con palabras muy sencillas, sin ornamentos, con el adjetivo justo, con una implícita nostalgia que casi no se hace visible, por ejemplo en “así aprenderé a vivir”, dice Turá:
“Me pintaré con barniz transparente
para imaginar que no estoy,
o quizá cerraré los ojos con fuerza
para no ver lo que esta pasando.
Me taparé los oídos
para no oír la risa ni el llanto
ataré mis manos en la espalda
para que nadie me escupa en ellas,
coseré mi boca para no morder;
ahorraré mis energías
para no herir,
o pediré una extradición
hacia ninguna parte”
En micro relatos como el titulado “Hoy”, en el que la única frase deja al lector con la necesidad de entablar un diálogo que, quizá como la autora, sabe inútil pero inexcusable; dice la escritora:
“Hoy"
Hoy voy a tirar todo a un container.
Literatura viva, llena de actualidad, de sencillez, de profundidad. En ella se encuentran gestos de la vida real, como en el relato “una noche larga”, cansancios y hastíos como en el poema - brevísimo- “Hábito”, preguntas por la función del escritor, como en el poema “Palabras”…
recorda: descarga gratis del libro se agradecen comentarios :)
http://stores.lulu.com/mon tsetura
Crítica de Alena Collar.
Viene a Referencias un libro que tiene dos cualidades a destacar: la calidad de sus fotografías, originales de la autora, y la calidad de sus textos.
Los textos de Montse Turà son una gavilla de poemas y prosas, breve en cada uno de ellos nos hablan a través de las imágenes y las palabras de cosas tan sencillas como vivir, morir, amar y desencontrarse.
En su mayoría 42 escritos en castellano, 7 en catalán, atraviesan la desolación de lo habitual con una mirada detenida, con palabras muy sencillas, sin ornamentos, con el adjetivo justo, con una implícita nostalgia que casi no se hace visible, por ejemplo en “así aprenderé a vivir”, dice Turá:
“Me pintaré con barniz transparente
para imaginar que no estoy,
o quizá cerraré los ojos con fuerza
para no ver lo que esta pasando.
Me taparé los oídos
para no oír la risa ni el llanto
ataré mis manos en la espalda
para que nadie me escupa en ellas,
coseré mi boca para no morder;
ahorraré mis energías
para no herir,
o pediré una extradición
hacia ninguna parte”
En micro relatos como el titulado “Hoy”, en el que la única frase deja al lector con la necesidad de entablar un diálogo que, quizá como la autora, sabe inútil pero inexcusable; dice la escritora:
“Hoy"
Hoy voy a tirar todo a un container.
Literatura viva, llena de actualidad, de sencillez, de profundidad. En ella se encuentran gestos de la vida real, como en el relato “una noche larga”, cansancios y hastíos como en el poema - brevísimo- “Hábito”, preguntas por la función del escritor, como en el poema “Palabras”…
recorda: descarga gratis del libro se agradecen comentarios :)
http://stores.lulu.com/mon
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